Talento, innovación y compromiso en la XI Edición de los Premios Nacionales de Diseño y Sostenibilidad de Envase y Embalaje.

El reto lanzado por Logifruit para los premios organizados por el Clúster de Innovación en Envase y Embalaje buscaba ofrecer una solución logística que asegurase la calidad y frescura de los productos frescos en la última milla.

Por tercera vez consecutiva Logifruit ha participado en los Premios de Innovación organizados por el Clúster del Envase y Embalaje como una manera de fomentar el talento innovador en el sector de la logística. Estudiantes universitarios de escuelas de diseño, universidades y otros centros académicos superiores participan para resolver retos relacionados con el envase. Durante estos tres años, más de 100 estudiantes han aportado sus ideas a Logifruit con más de 50 proyectos respondiendo a diferentes retos lanzados desde el área de Innovación de la empresa Las empresas plantean estos retos para los que los estudiantes aporten sus ideas, mentorizando, analizando y evaluando sus proyectos para elegir un ganador y dos finalistas.

La tendencia por la venta online de la distribución se ha visto sino acrecentada en los últimos meses, donde el confinamiento debido al Covid-19 y los nuevos hábitos de compra han provocado un fuerte crecimiento de la venta online. La necesidad de garantizar la seguridad alimentaria y la frescura de los productos en la última milla debía plantearse además desde un punto de vista sostenible, indispensable dentro del modelo circular de Logifruit.

El trabajo ganador del reto ha sido el proyecto ‘Bambox’ del equipo compuesto por Sofía Nieves, Ana Tudó y Javier Redondo de la Universidad de Zaragoza. El grupo de estudiantes diseñó una caja reutilizable, fabricada solamente con dos materiales y con estructura fácil de manipular y apilar, buscando la eficiencia en su almacenaje.

Tal y como destacó Sofía Nieves, una de las integrantes del equipo, su principal novedad es el uso del bambú como sistema aislante en la parte interior. Mientras el exterior está formado por polipropileno, esta capa interior supone un material 100% biodegradable y reutilizable al que los ganadores sometieron a estudio para demostrar que una capa fina de bambú aísla, pero también incrementa la higiene y calidad de los alimentos que contiene. El embalaje además incluye en su diseño, una cámara vacía para conseguir un aislante eficiente, sostenible e higiénico. Cuenta con tecnología NFC para controlar la temperatura y supone una alternativa sostenible a los envases refrigerantes que podemos encontrar hoy en día

Otros dos proyectos presentados obtuvieron un accésit: ‘Airtop’, del equipo de Marcos Sánchez y Daniel Pineda de ESD Madrid; y ‘Green Box JL’ de Laura Fresnillo y María Julieta Molinari de la Universidad Alfonso X el Sabio.

Aunque como destacó la organización no fue una edición fácil, se consiguió el objetivo de conectar el talento de los alumnos con las necesidades de las empresas mediante la innovación.

Al acto asistieron, entre otros, la Secretaria Autonómica de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Consumo de la Generalitat Valenciana, Rebeca Torró; así como la Directora General de Industria, Energía y Minas, María Empar Martínez. También asistió la ganadora del año pasado Raquel Muñoz, plata en los WorldStar Student Awards que convoca anualmente la World Packaging Organization. Durante la gala, la estudiante contó su experiencia y animó a los demás estudiantes con su historia.